Los casos de acoso sexual y acoso por razón de sexo que se dan en el ámbito laboral son (en gran parte) evitables, si se cuenta con un compromiso explícito por parte de la empresa. Como se recoge en la Ley Orgánica 3/2007 para la igualdad efectiva de hombres y mujeres, las empresas tienen la responsabilidad de garantizar a sus trabajadores un ambiente de trabajo agradable en el que se evite el acoso, además de disponer de un protocolo de acoso sexual en la empresa, para su denuncia y sanción.
La sensibilización y la denuncia del acoso sexual y por razón de sexo en el trabajo es una responsabilidad individual de todos, por lo que la educación en el tema es fundamental para aprender a detectar posibles casos. En este post te dejamos toda la información que una empresa necesita sobre sobre los protocolos de actuación en caso de acoso sexual en el trabajo. Si quieres más información sobre el tema, te recomendamos que visites este artículo: «Acoso por razón de sexo y acoso sexual en el trabajo (I)»
La importancia de la detección temprana
Una buena manera de evitar un conflicto es detectarlo de manera temprana y poder actuar con anticipación. Este es el momento de comprobar si la empresa cuenta con los suficientes mecanismos psicosociales para analizar si el ambiente de trabajo propicia las situaciones de violencia.
Los casos de acoso suelen estar ligados a cómo se desarrollan las relaciones entre los trabajadores y a la manera de estructurarse la empresa. Por ello es necesario prestar atención a la manera de organizar los puestos, así como a los procedimientos de admisión y ascenso dentro de la empresa.
Otra parte muy importante para asegurar un trato justo es que la plantilla cuente con el apoyo y la comunicación correcta, tanto entre ellos como con sus superiores. Tener canales que pongan al alcance la formación necesaria en cuestiones de igualdad y que propicien la recogida de información de manera periódica repercutirá positivamente en el clima de trabajo y, por consiguiente, en la correcta consecución de los objetivos empresariales.
Las fases del protocolo
En los casos en los que la intervención temprana no sea suficiente o no se llegue a poner fin al conflicto, es necesaria una correcta mediación y gestión legal. La empresa debe contar con un comité, cuyos representantes deben haber sido elegidos previamente de forma consensuada por todos los trabajadores. Este comité será el encargado de emprender acciones en las diferentes fases del protocolo de acoso sexual en la empresa.
- Fase de denuncia: esta fase la iniciará la propia persona afectada o cualquier otro trabajador que esté en conocimiento del problema. En este segundo caso, el procedimiento no se podrá poner en marcha sin la pertinente comunicación y aprobación de la víctima.
- Fase de investigación: con la denuncia ya tramitada, la comisión debe comenzar con una investigación del caso. Aquí se contemplan todas las pruebas aportadas por los afectados y los posibles testigos.
- Fase de resolución: La comisión debe elaborar un informe detallado donde conste toda la información de la denuncia, las pruebas realizadas, los hechos acreditados y las propuestas de solución.
Garantías que debe cumplir la empresa
Una vez iniciado un procedimiento de denuncia y se ponga en marcha el protocolo de acoso sexual en la empresa, estatiene la obligación a cumplir con ciertas garantías, de no ser así el procedimiento podría ser considerado nulo o irregular. Dichas garantías son:
- Dar la posibilidad a la persona denunciante de acudir a otras vías de denuncia externas.
- Asegurar la imparcialidad y el trato justo a todas las partes afectadas.
- Garantizar el derecho a la intimidad de los afectados y los posibles testigos.
- Hacer un correcto tratamiento de los datos personales.
- Asegurar que el procedimiento sea rápido y efectivo.
- Otorgar credibilidad a los hechos denunciados.
- Procurar protección a la víctima durante el trámite y tomar las medidas cautelares pertinentes.
- Garantizar que no habrá represalias por el hecho de haber denunciado.
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