diagnostico

Conforme colaboramos en la implantación de planes de igualdad, se va haciendo cada vez más evidente que es un proceso relativamente complejo en el que hay que adecuarse a algunas pautas para hacerlo bien. Una de las fases que más complican la vida a las empresas es el diagnóstico de desigualdades.

En este texto presentamos las ideas elementales para comprender la fase de diagnóstico en un plan de igualdad. Porque sabemos que existen desigualdades (o suelen existir), pero hemos de saber cuáles son exactamente y cuál es su magnitud para corregirlas tomando las medidas adecuadas y precisas. ¿Quieres saber más?

El diagnóstico del plan de igualdad a vista de pájaro

El diagnóstico es la segunda fase dentro de un plan de igualdad. Consiste, básicamente, en reunir y analizar datos para medir hasta qué punto existe una igualdad en la empresa en el momento previo a la creación del plan de igualdad; se trata de saber “en qué punto estamos”, para poder ir avanzando a partir de ese punto.

El requisito previo para lanzarnos a diagnosticar es haber constituido ya la [comisión negociadora LINK!!! TEXTO “La comisión negociadora, la espina en los planes de igualdad”]. Si ya lo has conseguido, ¡enhorabuena! En este punto, los objetivos del diagnóstico serán:

Para ello adaptamos una perspectiva de género, o sea, queremos comprender cómo impacta en empleados y empleadas de forma diferenciada la gestión y la actividad en la organización. A continuación profundizamos un poco en los detalles sobre cada uno de estos objetivos.

plan de igualdad

Las actuaciones (y lo que implica cada una)

Repasamos ahora la secuencia de actuaciones para desarrollar el diagnóstico, en cinco fases, junto con sus características esenciales:

Planificación

Si queremos que los planes salgan bien, lo primero es… ¡hacer el plan! Cuatro puntos clave:

Recopilación de información

Consiste básicamente en recoger los datos e indicadores de cada materia que queramos analizar en el diagnóstico, teniendo en cuenta que:

Análisis de información

Este es el meollo del asunto. Se trata principalmente de descubrir nuestros puntos fuertes y nuestras áreas de mejora. Respecto a los segundos, es la hora de señalar los problemas y sus causas, y de plantear posibles soluciones o medidas correctoras. Hemos de guiarnos por el anexo del RD 901/2020.

Sin ánimo de exhaustividad, algunos temas en los que poner el foco serían la clasificación profesional, la comunicación corporativa, la conciliación familiar o la prevención del acoso sexual o laboral por razón de sexo, entre muchos otros.

Informe de diagnóstico

Todo lo que hemos aprendido se plasma en un informe de resultados. Este informe recoge conclusiones y propuestas, y será una pieza fundamental en el plan de igualdad. Se redacta conforme a un modelo y debe reflejar:

Comunicación

Tan importante como saber algo es contar que lo sabemos. Ahora toca informar a la plantilla de los resultados del diagnóstico; una buena práctica en el momento de hacerlo es explicar también que esta es todavía una fase previa; todavía queda un largo trecho por andar para llegar a ver el plan de igualdad en marcha…

La experiencia es un grado

En efecto, aún falta el diseño, aprobación y registro del plan de igualdad hasta llegar a su implementación; y luego, queda el seguimiento y evaluación del mismo… Si quieres, Igualándote te ayuda a diseñar el plan de igualdad de tu empresa a la medida.