Pese a que en los últimos años se ha producido una notable mejoría, la brecha de género en el ámbito laboral continúa siendo a día de hoy una preocupante realidad, traducida a la postre en un menoscabo del rol de las mujeres dentro de la empresa con respecto al de los hombres. Este quebranto se manifiesta en aspectos tales como menores salarios, mayor acoso laboral, más desempleo, menos mujeres en puestos directivos, etcétera.
Este contexto refuerza la necesidad de abordar soluciones dentro de las empresas que ayuden a que las desigualdades entre hombres y mujeres continúen descendiendo. En este sentido, conseguir que las empresas promuevan una cultura laboral más eficaz e inclusiva constituye la piedra angular para acelerar el proceso que conduzca a una completa igualdad de género, desarrollando a tal fin las acciones necesarias que permitan alcanzar un mayor empoderamiento de la mujer en el seno de la empresa.
¿Cuáles son las acciones clave para impulsar una mayor igualdad de género en el ámbito laboral?
Son muchas y variadas las acciones que pueden ejercitarse con vista a fomentar una mayor equidad entre hombres y mujeres dentro de las organizaciones empresariales. Desde Igualándote queremos ofrecerte un listado con algunas de las más relevantes:
- 1. Impulsar políticas de equidad salarial. La brecha salarial por razón de género sigue siendo un importante desafío en España. Es vital por ello que las empresas implementen políticas que garanticen salarios equitativos entre aquellos hombres y mujeres que desempeñen idéntico trabajo. Una medida que además es obligatoria por ley (RD 902/2020) es el registro salarial de las empresas (herramienta que permite volcar y comparar las retribuciones de toda la plantilla de una empresa a fin de detectar desviaciones o brechas salariales).
- 2. Activar procesos de contratación y promoción del personal sin sesgos de género. Se trata en definitiva de implementar medidas que garanticen una genuina igualdad de oportunidades entre todas las personas candidatas, con independencia de su género. Incluiría el establecimiento de criterios de selección objetivos (experiencia, habilidades, etcétera) y la realización de procesos de evaluación basados principalmente en méritos.
- 3. Establecer programas de desarrollo profesional y capacitación para mujeres. Estos programas incluirían actividades tales como cursos de formación específicos, talleres de liderazgo o tutorías con experimentados líderes, entre otras.
- 4. Apostar claramente por la conciliación laboral. Se trataría de ofrecer alternativas que permitiesen a las mujeres (y también a los hombres) equilibrar más adecuadamente sus responsabilidades laborales y familiares. En este apartado resultan interesantes medidas tales como, entre otras, horarios flexibles, posibilidad de teletrabajo o servicios de guardería. Todas estas medidas contribuirán a que las mujeres se acojan menos a reducciones de jornada, algo que a la postre condiciona su desarrollo profesional.
- 5. Establecer campañas de sensibilización que realcen el trabajo desempeñado por la mujer. Es importante que la empresa destaque y reconozca públicamente los éxitos de sus trabajadoras en el desempeño de su labor. Vendría a ser, sin duda, un modo de reivindicar su papel, inspirar a otras mujeres y romper estereotipos de género.
- 6. Interesarse por saber lo que piensan ellas. También es muy importante mantener en todo momento una comunicación fluida con las trabajadoras de la empresa. Saber lo que ellas piensan resulta esencial para abordar cualquier problema de brecha de género. A tal fin, se pueden crear buzones de sugerencias, establecer foros de debate, encuestas anónimas, etcétera, todo ello con el objetivo puesto en conocer cómo se sienten y cuáles son sus principales motivaciones.
¿Qué papel cobran los Planes de Igualdad en la disminución de la brecha de género?
Los Planes de Igualdad en las empresas son instrumentos de actuación cuyo propósito es alcanzar una verdadera igualdad de trato y oportunidades entre las mujeres y hombres que componen la plantilla de una empresa. Su objetivo último es, en definitiva, eliminar cualquier clase de discriminación por razón de género en el funcionamiento y gestión diaria de la empresa. Por lo demás, este tipo de planes son obligatorios en aquellas organizaciones empresariales que cuenten con más de 50 personas en su plantilla.
En todo caso, obligaciones legales al margen, lo cierto es que los planes de igualdad tienen un impacto muy positivo en las empresas. En primer lugar, no debe olvidarse que ofrecer un marco de igualdad de oportunidades constituye de por sí un ejercicio de justicia social que, como tal, fortalece la reputación de las entidades que lo aplican. Por otro lado, las políticas de igualdad aumentan de por sí la capacidad de las empresas de atraer y retener talento, así como el compromiso y sentimiento de permanencia por parte de sus empleados.
Si estás interesado o interesada en configurar para tu negocio un Plan de Igualdad, no dudes en contactarnos. En Igualándote disponemos de un amplio equipo de consultoría experto en la elaboración e implementación de este tipo de instrumentos, quienes te ofrecerán un servicio personalizado y ajustado a las específicas condiciones de tu empresa.
—– Fuentes consultadas para la elaboración de este artículo: https://www.pactomundial.org/noticia/ https://www.igualdadenlaempresa.es/