En Igualándote creemos que la eficiencia y el compromiso no están reñidos con la calidad ni con los derechos laborales. Por eso hoy queremos compartir un caso que demuestra que, con organización, rigor y trabajo en equipo, es posible alcanzar retos que a primera vista parecen imposibles.
Durante el pasado trimestre, conseguimos inscribir seis planes de igualdad para empresas de menos de 50 personas en plantilla en menos de tres meses. Este logro no solo permitió que nuestros clientes accedieran a las subvenciones convocadas por la Junta de Andalucía, sino que lo hicimos sin alterar nuestra agenda habitual de trabajo. Un éxito colectivo que refleja los valores y la metodología que nos definen.
El contexto: una oportunidad con un plazo ajustado
La Junta de Andalucía habilitó recientemente una línea de subvenciones destinadas a empresas andaluzas de menor tamaño que quisieran implantar un plan de igualdad. La convocatoria suponía una oportunidad excelente para muchas entidades que, hasta ahora, no estaban obligadas legalmente a tener un plan, pero querían avanzar en igualdad y beneficiarse del apoyo económico para hacerlo.
El principal reto: el plazo para inscribir los planes era de solo tres meses, lo que implicaba ajustar procesos, priorizar tareas y actuar con rapidez… sin sacrificar calidad, ni participación.
La estrategia: organización, especialización y autoexigencia
Desde Igualándote, decidimos asumir el reto para seis de nuestras empresas clientes. La clave para lograrlo estuvo en la colaboración coordinada de todo el equipo.
Una vez recibidas las resoluciones favorables, el proceso pasó a nuestra “sala de máquinas”: el equipo técnico de Igualándote. Optamos por aplicar nuestro modelo habitual de implantación de planes de igualdad, pero con una mayor rigidez interna en los plazos y en los controles de calidad. A pesar de coincidir con el periodo navideño, cumplimos cada una de las fases con precisión, desde el diagnóstico hasta la inscripción final en el REGCON.
El resultado: seis empresas, seis planes, seis inscripciones
Las seis empresas que confiaron en nosotros no solo obtuvieron su subvención, sino que cuentan hoy con un plan de igualdad adaptado a su realidad, validado legalmente y con una hoja de ruta clara para avanzar hacia la equidad.
Este caso pone de manifiesto que es posible ser ágiles sin improvisar, y que incluso los plazos más ajustados pueden cumplirse si existe un compromiso compartido y un método claro de trabajo. También reafirma nuestra apuesta por acompañar a empresas de todos los tamaños, demostrando que la igualdad no es solo una obligación legal, sino una oportunidad para crecer con valores.
Gracias al equipo y a nuestros clientes
Desde aquí, queremos agradecer a nuestro equipo por su entrega, su profesionalidad y su capacidad para convertir los retos en oportunidades. Y, por supuesto, a las empresas que depositaron su confianza en Igualándote. Su implicación y disposición fueron decisivas para que el proceso fluyera de forma eficaz.
En Igualándote seguimos trabajando cada día con un objetivo claro: acercar la igualdad a la realidad de cada empresa, con soluciones jurídicas, prácticas y sostenibles. ¿Hablamos?
